Este perfume es una fragancia femenina, luminosa y romántica, que despliega una evolución suave desde un frescor frutal hasta un fondo cálido y envolvente, perfecta para quien busca una esencia dulce pero elegante, con un aire de delicadeza floral.
Salida
La fragancia se abre con una combinación jugosa y chispeante: el durazno aporta una dulzura aterciopelada y sensual, complementada por la bergamota, que introduce un toque cítrico y luminoso, refrescando la mezcla. La pera añade un matiz acuoso, suave y azucarado, creando una entrada femenina y alegre.
Corazón
En el corazón, el perfume se vuelve floral y romántico. El lirio de los valles brinda una frescura verde y limpia; el jazmín, su característica intensidad blanca y seductora; y la rosa, un toque clásico y atemporal. Esta tríada floral genera una sensación de elegancia etérea, como un ramo de flores en plena primavera.
Fondo
Al secar, la fragancia se transforma en una estela cálida y reconfortante. La vainilla introduce una dulzura cremosa y sensual, el sándalo aporta suavidad leñosa con un toque lactónico, y el ámbar sella la composición con un fondo dorado, envolvente y ligeramente resinoso.
Esta fragancia evoca a una mujer romántica, dulce y segura, con un aura natural y encantadora. Tiene un carácter versátil, ideal para el día o eventos especiales, y se adapta perfectamente a climas templados o primaverales. Tiene la calidez de una caricia y la frescura de una flor recién cortada.